Consiste en sacar al sujeto de la situación cuando emite la conducta que deseamos suprimir; como consecuencia el sujeto pierde contacto con los estímulos discriminativos así como los reforzadores consecuenciales.
La técnica se aplica colocando al niño en un sitio aburrido (aislado de estímulos discriminativos), es necesario trasladarlo inmediatamente después de que aparezca la conducta inadecuada, el adulto debe mantener la calma y no discutir con el niño o niña. Se aislará un minuto por año de vida, no se puede permitir que el niño o niña salga antes de tiempo del lugar de aislamiento.
Se muestra el diagrama de la técnica.
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